Fin de verano y feliz cumpleaños

Bueno después de un estado en off bastante prudencial, aquí estoy iniciando una vez más un post que no se sí tendrá fin o será como los 20 anteriores que no han visto la luz (exagerada que es una oye!!).

Ahora si que me pongo en el final de verano ya que fue ayer, y la verdad es que hay muchas cosas que contar.

Ya narre mi primera parte de vacaciones estupendas con los abuelos. Después tuvimos unas vacaciones "a tres" (como diría una muy querida amiga). Bueno o "a seis", porque casi de la mitad de la estancia playeril la pasamos con unos buenos amigos y su criaturita de la misma edad que el nene de la casa. 

Han sido unos días fantásticos, por supuesto diferentes a como veníamos pasando las vacaciones estos últimos años. Pero oye yo encantada de la razón que ha marcado esa diferencia.

Es increíble como simplemente ver la cara de tu pequeño cuando ve el mar, como disfrutaba con ello, te hace inmensamente feliz. Y poder compartirlo con tu pareja o con esos amigos que están pasando por esta misma etapa, hace que sepa mejor aún.
Mañanitas de playa, tarde de siesta y piscina, y cenas de barbacoa con charlas interesantes hasta más tarde de lo que últimamente estamos acostumbrados. No hacia falta nada más, tan simple y sencillo, ni torres que ver, ni monumentos, ni noches de fiesta, ni tostarme al sol vuelta y vuelta...aunque lo digo relax, tampoco mucho jajaja, tan sólo cuando el niño se dormia su siestecilla en la playa aprovechábamos para relajarnos con un refresquito nosotros también.

La vuelta fue peor que otros años, bastante peor diría yo, restarme horas de estar con mi enano todavía lo llevo mal a día de hoy. 

La evolución del niño estos meses  ha sido brutal, si a principios de verano apenas gateaba, ahora ya anda y cuando me descuide corre. Ya ves que cuando le hablas te entiende (otra cosa es que haga caso), ya introducimos más alimentos y otra forma de comerlos.... Y un largo etcétera que no me da, porque son muchas cosas. 

Celebramos nuestros cumpleaños, porque si, mi peque ya cumplió un añito, y yo un mes después unos treinta y muchos. El del peque lo celebramos 4 veces, espero que no sea así todos los años porque nos puede arruinar, y el mío un par de ellas. 

Para mi ha sido un balance de año espectacular, jamás he estado tan feliz y tan agusto conmigo misma y con mi alrededor (bueno todo todo... Ejem alguna cosilla cambiaba pero tampoco vamos a abusar tal y como están las cosas).

Han sido muchos cambios en mi vida, pero todos a mejor, la perspectiva desde la que miro las cosas hoy por hoy es distinta, pero hace todos los días me acueste ilusionada y feliz por el día siguiente.

¿Sorprendida? Mucho. Porque ya no me apetece tirar de recuerdos del pasado, de cosas que hacía antes, ahora lo que apetece es mirar que voy hacer mañana o pasado o el mes que viene. Ver como cada día mi rizitos de oro particular me sorprende con algo nuevo que ha aprendido o que hace de repente, por que aunque no para (es un autentico nervio), yo contenta con que no pare, porque me gusta que sea así, a pesar de que a veces terminas agotada, rota pero contenta. Nunca pensé que una personita tan pequeña me iba a cambiar tanto la vida.

Bienvenido PRIMER AÑO, estamos preparados para el segundo ,)